Vecinos de la barriada de Cerro Reyes de Badajoz, donde tuvo lugar una intensa riada en 1997 y en la que perdieron la vida 22 personas, siguen esperando soluciones y aseguran que "algunas promesas del año pasado aún no se han hecho realidad".
Con motivo del 25 aniversario de la fatídica tragedia, las autoridades anunciaron en 2022 una rehabilitación de las zonas afectadas. Sin embargo, sus vecinos denuncian un año después "que la situación es la misma que entonces".
Siguen exigiendo la construcción del corredor verde o la demolición de las casas que quedan todavía están en ruinas un cuarto de siglo después. Aseguran que los solares siguen abandonados.
El presidente de la asociación de vecinos de la barriada, Miguel García, reclama que "las promesas que se hicieron hace un año, se lleven a cabo. Queremos pasar página de la riada y queremos que sea un barrio normal con sus zonas verdes y zonas deportivas".