Tener un menor acogido en nuestro hogar es, para la mayoría de quienes lo viven, un regalo. Así lo han manifestado hoy en un encuentro con motivo del Dia del Acogimiento Familiar. En nuestra región, hay 440 menores bajo la tutela de la Junta de Extremadura y, de ellos, solo 222 están en familias de acogida. Por este motivo, hacen falta muchas más familias que quieran formar parte del proyecto de vida de estos niños y niñas que, por distintos motivos, no pueden estar con sus padres biológicos.
Cristina es madre de acogimiento de urgencia, y sus manos han cuidado ya a siete bebés. El último ha sido una pequeña que llegó a su casa con solo 15 días de vida pero, al estar en acogimiento de urgencia, solo puede cuidar de los menores el primer año de vida. Reconoce que la despedida es dura, pero compensa.
Acogimiento familiar
Hay distintas modalidades que dan respuesta a distintas necesidades: familias de urgencia, familias permanentes o colaboradoras. Olimpia y María acogen en su hogar durante fines de semana o periodos vacacionales a chicos que están en centros tutelados.
La Junta de Extremadura ha mejorado las condiciones para estas familias como una manera de incentivar que crezca la acogida en nuestra región. El reto, asegura la consejera de Salud, es dar cobertura a los más pequeños, con medidas encaminadas también a que la familia extensa como tíos, abuelos o hermanos mayores, puedan, con ayuda económica, ser esa red afectiva que los menores necesitan.