Anuncia tiene 59 años y sufre, desde su nacimiento, parálisis cerebral infantil. Es una luchadora nata. Anun, como le llaman sus amigos, no tiene límites, pero tampoco ha tenido una vida fácil. Durante sus primeros años no pudo acudir al cole, como el resto de niños de su edad. Estudiaba en casa con una maestra.
La parálisis cerebral dañó su sistema locomotor y dificultó su capacidad de movimiento, algo que le lleva a moverse en silla de ruedas. Pero que no le impidió ser campeona de España de Slalom en el año 81. Éxitos en el mundo del deporte que no se acompañaban de éxitos laborales. Para Anuncia encontrar un trabajo ha sido su principal barrera, hasta que en 2008 entró a formar parte del equipo de la Revista Grada.
Una mujer vitalista y alegre que comparte su eterna sonrisa con Javier, su marido. Un voluntario de Aspaceba al que conoció hace ahora 30 años. Juntos han saltado obstáculos, pero sobre todo han conseguido cumplir sueños. El último: se llama María y es su hija de acogida.
Anuncia es un ejemplo de que discapacidad puede ser sinónimo de oportunidad
