A Sara Martínez, camarera de la cafetería Floco en Badajoz, se le juntan los pedidos en las horas punta del desayuno, pero no le importa. Es una de las 3.422 personas del sector servicios que recuperó su empleo en julio. Empezó a trabajar en marzo, y a los pocos días fue despedida a causa del confinamiento provocado por la pandemia. Tras varios meses en casa, el mes pasado ha vuelto a ser contratada. "Es una estabilidad poder volver a trabajar con la que está cayendo. Estoy muy contenta".
El sector servicios tira del carro
El sector servicios es el que ha tirado del carro en la bajada del paro en la región de julio. Aunque en general el desempleo bajó en la mayoría de sectores, como la industria, con 332 personas menos, o la construcción, con 278 personas. A ello ha contribuido la demanda de las reformas en casa tras el confinamiento. "Algunos están invirtiendo el dinero de las vacaciones suspendidas en arreglar su casa", nos cuenta Diego Mateo, que tiene una empresa de reformas.
La agricultura destruyó empleo en julio
Pero no todos los sectores empiezan a ver la luz. En la agricultura, el paro ha subido en 883 personas durante el mes de julio. Entre los motivos, el retraso en el inicio de algunas campañas como la del tomate, que no ha empezado hasta esta semana, y sobre todo la bajada en la producción de la fruta de hueso debido a la climatología.
"Hemos pasado de contratar a 14 personas, a recoger la fruta sólo la familia"
Antonio Soriano, agricultor de Valdelacalzada, ha notado cómo su producción de ciruelas ha bajado un 65% este verano. Así que para esta campaña ha prescindido de contrataciones. "Normalmente contratamos a unas 14 personas para la recogida, pero este año nos hemos apañado con 3 o 4 de la familia, para ahorrar todos los costes posibles", nos cuenta.
Son las diferentes caras que aportan los datos del paro en un mes de julio atípico, como el resto del verano. De los 51.500 contratos firmados en julio en Extremadura, sólo dos mil fueron indefinidos.