En lo que llevamos de año, 23 extremeños han fallecido mientras trabajaban. Es un 65 % más que el año pasado. Hay más muertes, aunque el número de accidentes laborales con baja es algo inferior con respecto a 2023: son 10.304 hasta el momento.
Extremadura contará a partir de 2025 con 7 inspectores de trabajo más, que se sumarán a la plantilla actual, que ronda el medio centenar. El objetivo es reducir las cifras de siniestralidad laboral, poniendo el foco en los centros especiales de empleo, en construcción y agroindustria, que es donde se concentran más los accidentes.
Es el compromiso que la Junta ha arrancado al Ministerio en la Comisión Operativa de la Inspección de Trabajo. El consejero, Guillermo Santamaría, ha lamentado la elevada cifra de accidentes mortales en lo que llevamos de 2024, pero matiza que la mayoría son por causas inevitables por parte de la inspección.
Los sindicatos reclaman más inspecciones y más campañas de sensibilización, para evitar y reducir el número de siniestros. Será precisamente el próximo 28 de noviembre cuando Junta y agentes sociales firmen el 9º Plan de Actuación en Prevención de Riesgos Laborales.