El Hospital Universitario de Badajoz se ha convertido en uno de los cuatro del mundo que ha implantado con éxito a dos pacientes un nuevo dispositivo de desfibrilador automático implantable (DAI), al que se añade terapia de resincronización cardíaca (TRC) y que está conectado con el teléfono móvil a través de una aplicación.
Estos dispositivos DAI-TRC Abbott Gallant incluyen las tecnologías más avanzadas de control del ritmo cardíaco, así como nuevos beneficios para los pacientes con disfunciones del ritmo e insuficiencia cardíaca.
Como beneficios adicionales destaca un diseño orientado al paciente, así como mejoras en la longevidad de la batería y compatibilidad con los equipos de Resonancia Magnética (RM).
La Junta recuerda que los cardiólogos a menudo recomiendan la implantación de un DAI-TRC como terapia preventiva en pacientes que padecen de una función cardíaca reducida y quienes podrían estar en riesgo de sufrir ritmos cardíacos anormales que pongan en riesgo su vida.
Los DAI-TRC están equipados con terapias y tecnología que permite restaurar el ritmo en los ventrículos del corazón en aquellos pacientes que tienen una función cardíaca reducida, y además mejora la eficacia en la contracción del ventrículo izquierdo.
La aplicación establece una comunicación permanente entre los pacientes y los médicos y permite acceder a la historia de transmisiones, al rendimiento del dispositivo o solicitar su siguiente cita.
Gracias al uso de la misma, los médicos pueden monitorizar estrechamente a los pacientes de manera remota, lo que permite la identificación de episodios asintomáticos, así como transmisiones activadas por los pacientes, que pueden ayudar a una intervención más rápida y mejorar la eficacia de los equipos médicos de seguimiento de los dispositivos.
Esto incluye los controles de ciberseguridad más avanzados, el concurso de expertos en ciberseguridad de la industria que han colaborado en el diseño y prueba de los sistemas de control. Según el fabricante, esto permite equipar a los dispositivos con la habilidad de actualizarse conforme la futura evolución en los riesgos en ciberseguridad.