Según el estudio “Mujer, discapacidad y violencia de género”, el 20,7% de las mujeres con discapacidad acreditada ha sufrido violencia física o sexual de alguna pareja a lo largo de sus vidas. Además, estas mujeres tienen un alto riesgo de experimentar violencia basada en estereotipos sociales y aspectos subjetivos que intentan deshumanizarlas o infantilizarlas, así como excluirlas o aislarlas.
Pese a los esfuerzos realizados para visibilizar la violencia de género hacia las mujeres con capacidades diferentes, la trabajadora social y sexóloga, Zoraida Carretero, considera que, todavía, se habla poco de este problema, apuntando a una brecha existente en la concienciación y la adopción de medidas efectivas. Para Zoraida, el doble esfuerzo que se exige a estas mujeres para ser oídas y para acceder a recursos de apoyo y denuncia es una muestra más de la falta de inclusividad y accesibilidad, ampliando el abismo de la vulnerabilidad.
En una entrevista en el programa informativo matinal de Canal Extremadura, 'Ahora Extremadura', la trabajadora social ha señalado que la violencia no solo deja marcas físicas; sus secuelas mentales y cognitivas son profundas y, en ocasiones, pueden resultar en nuevas discapacidades. Roturas de tímpano, fracturas de extremidades y trastornos como estrés o depresión son algunos resultados de la violencia prolongada hacia estas mujeres.
Un estudio de CERMI, además, deja otro dato extremadamente preocupante. Señala que un 67% de mujeres con discapacidad reconoce haber sido víctima de violencia por su pareja y el 75% no denuncia.
En el terreno de la protección y prevención, Zoraida Carretero enfatiza la educación sexual integral para niños y niñas desde temprano, evitando la normalización del porno violento y las actitudes que perpetúan la violencia sexista. Además, la entrevistada llama la atención sobre el incremento de violencia sexual, especialmente en la infancia, exacerbado por el fácil acceso al contenido pornográfico y su peligrosa normalización.
La trabajadora social alerta, además, sobre cómo ciertas plataformas como OnlyFans, lejos de ser espacios de libertad, pueden convertirse en trampas donde las mujeres con discapacidad son susceptibles de coacción y abuso bajo pretextos económicos y laborales.
Una educación, subraya Zoraida Carretero, que es fundamental que se imparta desde el hogar, poniendo énfasis en concienciar a los más pequeños en el respeto por el propio cuerpo y los demás, la definición de límites y el consentimiento como herramientas clave para prevenir la violencia.
Charlas de la Policía Nacional para concienciar sobre la violencia de género
A esa educación también contribuyen los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. De hecho, la Policía Nacional lleva a cabo diferentes charlas que pretenden concienciar en la prevención de la violencia de género, específicamente dirigida a jóvenes en centros de educación especial.
Uno de los agentes que las imparte, el subinspector Francisco Becerra, considera fundamental que los más jóvenes reciban charlas de este tipo para actuar sobre la prevención y la detección temprana de casos de violencia para evitar el desarrollo de relaciones tóxicas.
Becerra pone en relieve, además, que tanto los agresores como las víctimas deben reconocer "que esa relación no va bien, que esa relación puede terminar mal". La charla busca que los estudiantes aprendan a relacionarse sanamente, cambiando los patrones de comportamiento y comunicación entre las parejas. A través de ejercicios de empatía y la promoción de un trato respetuoso, se espera que los alumnos sean capaces de "cambiar la forma de comunicarse con una chica, la forma de interactuar, la forma de relacionarse a nivel de pareja".
Sobrecogen, además, testimonios como el de Claudia, una chica con discapacidad que relata una relación abusiva que mantuvo con un compañero, en el que este ejerció un control total sobre ella y sus relaciones con los demás. Claudia asegura que, después de escuchar los testimonios recogidos en estas charlas, sabe ahora plantarse contra la violencia de género
Estas charlas de la Policía Nacional se enmarcan dentro del Plan de Igualdad, que lleva tres años intentando visibilizar la violencia de género en el entorno escolar y en la calle.
El 67% de las mujeres con discapacidad ha sufrido violencia de género en algún momento de sus vidas
