Extremadura es una de las ocho comunidades autónomas en las que no hubo un solo contagio la pasada semana en las residencias de mayores, junto con Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Comunidad Valenciana, Galicia y La Rioja, además de en Ceuta y Melilla.
Aunque la vacuna contra la COVID-19 sigue frenando los contagios y las muertes en las residencias de mayores, los fallecimientos en la última semana han aumentado a once frente a siete de la anterior, con Castilla-La Mancha a la cabeza, con cuatro.
Son datos de la semana del 19 al 25 de abril, según el informe que comenzó a publicar el Imserso a principios de marzo y que se actualiza cada viernes con la información aportada por las comunidades autónomas.
Además de los cuatro ancianos muertos en Castilla-La Mancha, se han registrado dos defunciones por la covid Cataluña, otras dos en Aragón, otra en Castilla y León y otra en Madrid.
De acuerdo al informe, también han subido en una semana los contagios, ya que de los 55 contabilizados en la semana del 12 al 18 de abril se ha pasado en esta a 60 en residencias de mayores.
La cifra de contagios se eleva a 75 si se añaden a esas residencias los centros de personas con discapacidad y otros alojamientos de servicios sociales.
De todos modos, frente a los datos de enero, antes de que se empezara a administrar la segunda dosis y cuando se diagnosticaron 4.916 contagios, un mes después ya eran sólo 202 los contagios, descendiendo a 111 en la última semana del mes de febrero y hasta los 75 actuales en todos los centros residenciales.
En lo que va de año se han contagiado 18.424 personas en los centros residenciales, de las que 16.723 corresponden a centros de mayores.
Ocho fueron las comunidades autónomas en las que no hubo un solo contagio la pasada semana en las residencias de mayores: Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia y La Rioja, además de en Ceuta y Melilla.
Por el contrario, se registraron 18 en Cataluña, 16 en Aragón, 8 en País Vasco, 4 en Andalucía, otros tantos en Castilla y León y los mismos en Castilla-La Mancha, 3 en Madrid, 2 en Murcia y 1 en Navarra.
El número de fallecidos desde el 1 de enero de este año hasta el 25 de abril es de 3.875 (21 por ciento de tasa de letalidad) en todos los centros residenciales, de los que 3.778 fallecieron en los de mayores.
Y si se contabilizan los fallecimientos desde el 14 de marzo del año pasado, cuando entró en vigor el estado de alarma, los fallecidos en todos los centros que tiene en cuenta el Imserso son 30.220, de los que 29.572 murieron en residencias de ancianos.