Las fiestas patronales, las verbenas, los desfiles procesionales y los eventos populares quedan prohibidos en Extremadura hasta el 31 de julio, de momento.
Ésta es una de las medidas preventivas de cara a la nueva normalidad que publicará este domingo el Diario Oficial de Extremadura (DOE), en la primera jornada ya sin estado de alarma.
Eso sí, en función de cómo evolucione la situación epidemiológica algunas de esas medidas se pueden flexibilizar, según ha explicado José María Vergeles, vicepresidente segundo y consejero de Sanidad de la Junta.
Sin Feria de San Juan en Badajoz
Una de esas fiestas suspendidas es la de San Juan, patrón de Badajoz, aunque ya se sabía desde finales de abril que no iba a celebrarse, tal y como anunció el alcalde pacense.
Es la primera vez que sucede en casi un siglo, y ni anoche hubo encendido en el recinto ferial ni este fin de semana hay feria de día por las calles del Casco Antiguo.
Otras medidas
El decreto de nueva normalidad detallará una serie de medidas de prevención por sectores y generales, como el aislamiento social en caso de sospecha de un positivo, la distancia social de 1,5 metros, la higiene, la ventilación de espacios y el pago con tarjeta.
También exige que para ingresar en un centro residencial sea necesario que la PCR resulte negativa, o que se establezcan tres tipos de confinamiento: núcleos poblacionales, pisos o viviendas, y residencias de mayores.
Otras medidas previstas en el decreto son el incremento de aforo de las autoescuelas y academias al margen del sistema educativo al 75 por ciento, mercadillos al aire libre al 75 por ciento, terrazas al 90 e interior de establecimientos al 70, y el cien por cien de aforo en las zonas comunes de los hoteles rurales.
Asimismo, entre otras cuestiones, se permiten bodas con un límite de 150 personas al aire libre y de 75 en espacios cerrados, y que haya público en algunas actividades deportivas siempre que no haya contacto estrecho.