La Federación Extremeña de Bares y Restaurantes (Fexbares) ha pedido que entre las decisiones que pudiera adoptar el Ejecutivo regional por el aumento de contagios de la covid-19 en la región no esté la reducción horaria de sus establecimientos, pues sería “un castigo inmerecido”, por lo que han abogado por mantener las limitaciones actuales.
Así, su presidente, José Parodi, ha mostrado su preocupación ante “cualquier planteamiento de restricciones” que puedan afectar a la hostelería, que “aún siguen cumpliendo con todas las medidas vigentes”.
En una nota de prensa, Fexbares ha considerado que la reducción horaria “no aportaría solución al problema, sino que sería “todo lo contrario, lo agravaría”, pues tendría el efecto, a su juicio, de “acabar con la sostenibilidad de nuestras empresas y el empleo”.
En estos momentos, iniciado el verano, según ha expuesto, la mayoría de los negocios de hostelería han visto reducido su horario de trabajo a no más de cinco horas.
Mismas limitaciones para la hostelería
“El sector hostelero extremeño espera y está convencido de que las futuras decisiones de la Junta de Extremadura irán en la línea de mantener las limitaciones actuales de trabajo y no disminuirlas con lo que conllevaría esa decisión”, ha apuntado.
En su opinión, durante toda la pandemia el sector ha tenido un “comportamiento ejemplar” a la hora de cumplir con todas las medidas adoptadas por el Gobierno nacional y regional. “Y, como consecuencia de ello, los focos de contagios siempre han estado lejos de nuestros establecimientos”, ha asegurado Fexbares.
Además, ha pedido la colaboración de toda la población extremeña, “como ha venido haciendo en todo momento”, para que la situación de la pandemia mejore.