El acuerdo alcanzado en marzo con los Letrados de la Administración de Justicia (LAJ) ha desencadenado nuevas reivindicaciones en otros colectivos judiciales. Desde el pasado 17 de abril, los funcionarios mantienen paros parciales diarios para exigir un incremento retributivo y la redefinición de sus funciones. Y ahora los jueces y fiscales amenazan con una huelga indefinida, a partir del próximo día 16, si no se actualizan sus salarios y se crean más plazas para evitar la saturación. Esta mañana representantes del Ministerio de Justicia y Hacienda se van a reunir con los magistrados para tratar de paralizar estas nuevas protestas.
Los abogados de oficio, los siguentes
El decano del Colegio de Abogados de Badajoz, Ildefonso Seller, asegura que "el principal perjudicado es el ciudadano" y explica que tras los dos años de pandemia, la huelga de los LAJ y los actuales parones de los funcionarios "la situación en los juzgados es crítica y llevará mucho tiempo volver a ponerse al día".
Seller es pesimista respecto al futuro porque a las protestas ya en marcha se podrían sumar, próximamente, los abogados del turno de oficio que llevan sin actualizar sus retribuciones "desde tiempos inmemoriales" y, además, tienen que hacer frente "a la gran diferencia que hay entre las distintas comunidades".
De momento, los únicos procesos que no se van a ver afectados son los que resuelven con los servicios mínimos y que son los relativos a las causas con menores, violencia de género, detenidos y despidos en el ámbito laboral.
