La venta a pérdidas de los agricultores y ganaderos es uno de los principales problemas del campo, sin embargo, la consejera de Agricultura, Begoña García Bernal, ha reconocido que es un asunto difícil de resolver porque "por ley no se pueden establecer unos precios mínimos ni se puede obligar a las empresas a comprar las cosechas".
Para garantizar que los productores reciben unos precios superiores a sus costes hay que determinar cuáles son esos costes, algo que varía mucho en función de cual sea el lugar o el tipo de explotación, por ello, para establecer unos precios de referencia, la Junta de Extremadura trabaja en la puesta en marcha de un observatorio regional de precios, un organismo para el que "se quiere contar con la colaboración de la Universidad de Extremadura y el Jurado de la Competencia", según ha explicado Bernal en nuestro informativo Primera Hora.
La consejera de Agricultura ha puesto como ejemplo a la Interprofesional del Vino de España, que es el organismo que agrupa a todos los integrantes de la cadena de valor, de viticultores a bodegueros, y que ha sido capaz de poner de acuerdo a todos sus miembros para "que cada una de las partes gane un poco", que es la única manera de garantizar el futuro del sector.