La situación del sector del vino en Extremadura empieza a ser límite. Con la subida de costes, la sequía y la paralización del mercado, no se está vendiendo vino.
Los depósitos de vino a granel se encuentran completamente llenos en muchas bodegas de la región y no ven el momento de ser vaciados El problema principal es que no hay ventas. En estos momentos se calcula que hay alrededor de un 80% de vino en stock en la región, una cifra muy alta, teniendo en cuenta que el año pasado por estas fechas se encontraban a menos del 50% y con ventas continuadas.
Desde el sector alertan de que están sufriendo una gran debacle y piden que desde Europa autoricen una destilación de crisis, que consiste en convertir este vino en alcohol y ponerlo de nuevo en el mercado. Una medida que piden países como Francia y que, desde España, el ministro Luis Planas ya aseguró que apoyarían si la Unión Europea la adoptase.
Los bodegueros piden que se actúe de manera inmediata. De lo contrario, afirman, las pérdidas pueden ser millonarias e incluso se teme por la campaña de este año. Por ello han anunciado manifestaciones para esta semana.