El agua de los desembalses trae a veces paz y otras conflicto. Y, de nuevo en las presas que gestiona Iberdrola en la cuenca del Tajo a su paso por la provincia de Cáceres, los desembalses empiezan a cuestionarse.
Estos son los datos de la última semana según embalses.net: 5 mil hectómetros cúbicos embalsados, 57 menos que la semana anterior. Son 57.000 millones de litros menos que han salido justo de las presas con aprovechamiento hidroeléctrico: las de Iberdrola. 27 mil millones litros menos en la presa de Alcántara, 2 mil millones menos en Cedillo, 19 mil millones menos en Gabriel y Galán y 10 mil millones de litros menos en Valdecañas.
Según ha podido saber Canal Extremadura, en este último, se ha desembalsado agua durante los últimos 14 días para producción energética.
En la zona se apunta a la compañía como responsable directa de esta pérdida de agua. Un agua que, dicen, debería atesorarse para el consumo o el riego y no para conseguir producir energía más barata: "no necesitamos energía, necesitamos agua. Es insostenible y es reprobable ética y moralmente", ha afirmado hoy Paco Castañares, Presidente de la Asociación de Amigos de Monfragüe.
La Junta pide a quien sospeche que denuncie, porque dice que los desembalses están permitidos, siempre que respeten la ley. Sobre si se ha respetado o no la legalidad, ni Iberdrola ni Confederación Hidrográfica del Tajo se han pronunciado aún.