Delegados de los sindicatos PIDE, SAE y SGTE, integrados en la federación USAE, ha protestado este miércoles ante la sede de la Presidencia de Junta de Extremadura, en Mérida, para exigir que se haga efectivo el abono de la subida salarial del 2 por ciento aprobada a nivel nacional.
Con pitada y consignas contra la Junta, el medio centenar de participantes han querido mostrar su rechazo a la actitud de la Junta, que hace que "sigamos sigan siendo los más baratos para la administración extremeña", según ha dicho el portavoz, José Manuel Chapado.
Bajo la consigna “En defensa de los Empleados Públicos", también exigen medidas para recuperar el poder adquisitivo de los empleados públicos extremeños, que desde 2010 ha retrocedido en un 5 por ciento.
Chapado ha recordado que son "los únicos" que tienen reclamada esta demanda ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, y ha lamentado que esta administración sea la única que no ha abonado esta deuda a sus trabajadores.
Además, ha resaltado que la subida aplicada en diciembre de 2020 fue sobre tres conceptos, y acusa a la Junta de no tener inteción alguna, ni a efectos legales ni de presupuestos, de volver a recuperar dicha subida.
"Solo se nos quiere a las duras, pero cuando son las maduras no quieren saber absolutamente nada de los empleados públicos que están a su servicio", ha dicho Chapado, que ha añadido que "hay que decirlo alto y claro, la administración adeuda a sus trabajadores y tiene que tomar medidas para recuperar el poder adquisitivo que han ido perdiendo".
En cuanto a las acciones anunciadas por otros sindicatos, como CSIF, que ha amenazado con una huelga general por este mismo motivo, Chapado ha señalado que "es una cuestión suya", ya que no contactado con ninguno de los sindicatos que conforman esta federación.
Además, ha remarcado que le parece "muy raro que alguien se movilice cuando está sentado en la Mesa General del Empleado Público y no reclama en dicha mesa que se apliquen los acuerdos".
A su juicio, unidad la podrá haber "si se va en la dirección correcta y la dirección correcta es reclamar lo que se debe al funcionariado, la mejora de sus condiciones laborales y todo aquello que no funciones y que los que están en la mesa están perpetuando e impidiendo que pueda mejorar".