La campaña del aceite ha dejado cifras de récord, pero para mal. Con una producción muy baja, y de menor calidad, la subida del precio ha hecho que muchos consumidores hayan buscado otras alternativas más baratas
Una campaña que se ha cerrado con una cifra histórica, menos de 40 mil toneladas producidas en la región. Muy lejos de las 108 mil también históricas conseguidas el año anterior. Una merma en la que ha influido, y mucho, el tiempo. En el mes de mayo se registraron muchos días de altas temperaturas, lo que provocó que la flor no fructificase y el fruto se cociera y muriera. Además, también han afectado las lluvias tardías de noviembre. La reducción tan drástica de la cosecha ha tenido también consecuencias en la calidad.
Esta situación, unida a los elevados costes energéticos, ha disparado el precio del aceite por encima de los 5 euros el kilo. Y es que los altos precios están llevando a los consumidores a buscar otras alternativas.
Desde el sector esperan que la situación sea coyuntural y se pueda mitigar este año si el tiempo acompaña.