Nuevo incidente en el tren Badajoz - Madrid. Este domingo por la tarde, el convoy que circulaba camino de la capital de España lo hacía sin aire acondicionado, sin agua y a cuarenta grados de temperatura. Los viajeros dijeron basta y en la estación toledana de Oropesa accionaron la palanca del freno para exigir que se reparase la climatización.
"Ha sido el viaje más terrible de todos los que he hecho"
Situación que han denunciado varios usuarios a través de las redes sociales. Entre ellos, Marcos García, que cogió el tren en Mérida. Asegura que "ha sido el viaje más terrible de todos los he hecho". Este joven, periodista de profesión, ha relatado para Canal Extremadura cómo sucedió todo. Afirma que "falló todo lo que podía fallar. No había agua en las máquinas dispensadoras y el aire acondicionado no funcionaba. Hacía un calor extremo en el vagón".
"Un hombre decidió tirar de la palanca como método para avisar al maquinista"
También ha explicado como, junto a otros pasajeros, decidieron buscar alguna solución. "Y fue entonces cuando un hombre, con el consenso de los que estábamos allí, decidió tirar de la palanca como método para avisar al maquinista". El maquinista, ha añadido, acudió y consiguió "arreglar mínimamente el aire".
Respuesta de Renfe
Renfe ha respondido a la llamada de Canal Extremadura y reconoce las quejas de los pasajeros, la avería del aire acondicionado y la parada técnica de diez minutos en Oropesa. Sin embargo, al hecho de que un viajero accionase el freno de emergencia, le llama "uso indebido del aparato de alarma".
También añade que, una vez solucionada la incidencia por personal de Renfe, el tren pudo continuar la marcha hasta destino, donde llegó con 34 minutos de retraso. Y que a los viajeros, 210, "se les mantuvo informados y podrán reclamar la devolución de la parte del importe del billete", tal como indican nuestras condiciones generales de Transportes.
No es la primera vez que el tren extremeño es protagonista por sus incidencias. Los ciudadanos hemos visto desde trenes que salen ardiendo a otros que descarrilan. Además de los ya más que habituales retrasos.
Pero sí llama la atención que esta última incidencia se produzca a tan sólo una semana de que entre en funcionamiento el tren rápido, los Alvia, y sea el Rey y el presidente del Gobierno quienes vengan a inaugurarlo.