29 Enero 2025, 16:29
Actualizado 29 Enero 2025, 16:29

Se cumplen tres meses de la catastrófica dana y las riadas que el 29 de octubre arrasaron Valencia. Más de 78 municipios quedaron cubiertos por el agua. La zona afectada tardará años en volver a la normalidad y lo peor de todo son las pérdidas humanas. 224 personas fallecieron y a esas muertes hay que sumar las de dos operarios que murieron, días posteriores, en las tareas de limpieza. Además, tras 90 días de búsqueda, aún hay tres personas desaparecidas. Por eso, hoy, 90 días después de la catástrofe, 400 profesionales continúan las labores de búsqueda. Desde la UME señalan: "nosotros no tenemos fecha de finalización y vamos a seguir buscando, hasta que aparezcan las personas"

75.000 viviendas afectadas y 50.000 empresas

Y a las pérdidas humanas se suman las económicas. Las inundaciones afectaron a más de 75.000 viviendas y casi 1.500 han quedado inhabitables. Cerca de 50.000 empresas resultaron dañadas. El 10% de ellas estima que no volverá a abrir hasta dentro de más de dos años. Extremeños que viven allí, como Teresa Cestero de Jerez de los Caballeros y residente en Paiporta, nos cuentan los perjuicios que sufren todavía. Dice Teresa: "hemos perdido los dos coches y todo lo que teníamos en el trastero, más los daños que hay en la comunidad. Somos 80 vecinos y justo hoy tenemos una reunión para ver los gastos que se nos presentan. Porque están hablando de unos 400.000 euros los daños que hay entre garajes, puertas y todo lo que hay que rehabilitar". Sonia Muñoz, también vive en Paiporta y nos cuenta que todavía se asombra cuando sale a la calle porque "están como desiertas y los negocios vacíos". 

"A veces el apoyo moral es más importante que el económico" 

La cara positiva de esta catástrofe han sido las innumerables muestras de solidaridad. Extremadura se volcó con Valencia y envió toneladas de ayuda. También centenares de voluntarios, como Carmen Blanco, se desplazaron hasta allí. Carmen destaca las muestras de agradecimiento que recibieron. "Los valencianos estaban super agradecidos, dando continuamente las gracias aunque no les ayudáramos directamente".

Son lazos que no se rompen. Los policías locales de Plasencia que viajaron a Valencia, todavía siguen en contacto con afectados. El subinspector Gonzalo David Miranda cuenta: "seguimos teniendo ese contacto para seguirles preguntando cómo se encuentran y darles todavía apoyo moral. Porque a veces es más importante el apoyo moral que el económico y saber que hay personas que se preocupan por ti en la distancia"

Porque los 600 kilómetros que nos separan de la zona cero, no han sido impedimento para acercarnos al pueblo valenciano.