El número de alquileres vacacionales sigue creciendo. Ahora, dos sentencias del Tribunal Supremo determinan que las comunidades de vecinos podrán prohibir pisos turísticos en su bloque de viviendas. Para ello, necesitarán el sí de tres quintas partes de los propietarios.
Y es que en las comunidades de vecinos con viviendas turísticas, la entrada y salida constante de viajeros puede provocar problemas en la convivencia. Por eso, la Justicia quiere poner límites.
Vicente Extremera, administrador de fincas en Mérida, apunta que "si la clase política regula bien el problema, realmente no enfrentan a unos vecinos con otros".
Una mayor regularización que también quieren los propietarios de pisos turísticos. No ven en Extremadura los problemas que sí existen en grandes ciudades como Barcelona o Sevilla, pero reconocen que el recelo de los residentes es cada vez mayor.
Javier Gutiérrez, presidente de la Asociación de Apartamentos Turísticos de Extremadura, explica que trabajan "mano a mano con comunidades de vecinos e instituciones, para que sea la regularización más acertada posible y más consensuada entre todos".
Las sentencias del Supremo no tienen carácter retroactivo, por lo que conciliar ocio y descanso en los pisos que ya existen sigue siendo uno de los grandes retos.