En Guareña se ha encontrado un yacimiento tartésico único. Es único porque aparece por primera vez un edificio de unas características nunca vistas en el mediterráneo occidental, y la primera evidencia de un gran sacrificio animal. En un enorme patio de 125 metros cuadrados, en el siglo quinto antes de Cristo, sucedió un sacrificio religioso animal. Hay restos de 52 caballos, 4 vacas, 4 cerdos, 1 perro...que se encontraron sellados. Un hallazgo sin precedentes en la arqueología del mediterráneo.
Los arqueólogos digieren ahora los resultados obtenidos este año, cuarta etapa de las excavaciones.
Esther Rodríguez es coordinadora de la excavación. En una entrevista en el programa informativo Ahora Extremadura ha explicado que el elemento más destacado del yacimiento es la excepcional conservación de la estructura de la vivienda. Que el edificio esté tan bien conservado, con dos plantas en pie, nos está permitiendo acercarnos al tarteso de una manera diferente en un edificio prácticamente intacto, ha manifestado.