Fin de fiesta mustio, apagado, sin color. El Carnaval de Badajoz se despide en esta edición sin rendir homenaje a Don Carnal.
El coronavirus no pudo pararlo el año pasado, pero éste todo ha sido muy distinto y el peso de unos meses dramáticos lo ha acabado doblegando.
La capital pacense se queda por tanto sin la última de las noches de bullicio y desenfreno callejero, con miles de carnavaleros de la ciudad y de fuera de ella que no saldrán de sus casas.
San Francisco, la Plaza de España, San Atón, Santa María de la Cabeza... Todas ellas estarán vacías esta madrugada de Lunes de Carnaval, como los bares y pubs donde se concentraba la fiesta.
De todas las consecuencias de esta mortal pandemia que no se celebre el Carnaval resulta sin duda algo secundario, pero eso no quita para que Badajoz se sienta esta noche huérfana.