La sandía es una de las frutas más refrescantes en esta época del año, pero también se ha convertido, prácticamente, en un lujo para muchos bolsillos. Entre los motivos: el incremento de los costes para los agricultores y una cosecha escasa de melones y sandías que no cubre la demanda.
Por encima del euro el kilo
El momento de comprar una de las frutas más consumidas cuando aprieta el calor, se ha convertido en una odisea para muchos. Los precios de melones y sandías se han disparado.
En varios supermercados que hemos visitado, el año pasado vendían la sandía a unos 40 céntimos el kilo, mientras que este año no baja del euro. Y el precio del melón supera el euro y medio. Isabel Rodríguez, encargada de tienda, recuerda que "otros años, por estas fechas, estaban a 75 céntimos el kilo. Yo ahora las tengo a 99 céntimos, porque si a mí me las venden a 75 céntimos más IVA, no las puedo dar al mismo precio".
Baja cosecha y elevados costes de producción
Entre los motivos de los elevados precios de sandías y melones, están el incremento de los costes de producción y una cosecha escasa que no cubre la demanda. Los clientes llegan a pagar hasta dos euros más por llevarse a casa una fruta que se ha convertido en todo un lujo.
