La sequía es un fenómeno recurrente en la península, propia del clima mediterráneo. Ha aparecido a lo largo de la historia con mayor o menor gravedad, levantando quebraderos de cabeza a agricultores y ganaderos que temían (y temen en la actualidad) por las cosechas arruinadas y el ganado diezmado.
Para ello, la Iglesia Católica estableció una serie de rezos y actos religiosos destinados a implorar que el cielo tuviese piedad del pueblo, dependiendo de la gravedad del asunto. Así, si la sequía era breve, con unos rezos y rogativas dentro de los templos eran suficientes; el siguiente grado contaba, además, con la exposición de imágenes y de reliquias y con alguna procesión dentro del templo. En el tercer nivel ya se procesionaba por los campos e incluso se asomaban a las imágenes a los pozos, los ríos y las charcas para que viesen el lamentable panorama. Si se llegaba un punto más se realizaban peregrinaciones.
Esta información es útil no sólo para antropólogos e historiadores, sino también para los climatólogos. El estudio de estos fondos documentales permiten estimar sequías de varios siglos atrás y poner en contexto el clima actual.
Por ello, hablamos con Fernando Domínguez, investigador de la Universidad de Zaragoza que hizo en la de Extremadura su post-doctorado en estos temas. Esta entrevista se emitió el pasado viernes, 28 de abril de 2023 en "El Sol sale por el Oeste".