21 Mayo 2025, 14:00
Actualizado 21 Mayo 2025, 14:00

Los drones se han convertido una valiosa herramienta de vigilancia desde las alturas. Las imágenes y vídeos que aportan nos dan una visión global del terreno que es imposible alcanzar con nuestros ojos. Forman ya parte de nuestra vida cotidiana dándoles un uso de lo más variopinto, muchos de ellos de vigilancia y de control.  

Hace unas semanas un equipo de investigadores del Centro de Investigación sobre la Desertificación, perteneciente la Universidad de Valencia y al Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha iniciado un nuevo proyecto, llamado Meteodron, en el que estas mini-aeronaves pueden servir para mejorar las previsiones meteorológicas.  

Esta nueva técnica abre una nueva puerta “a la carta” para el análisis de la atmósfera. Podrán sobrevolar las distintas capas atmosféricas en vertical, en horizontal, en oblicuo... Más rápido o más despacio... ¡e incluso mantenerse! y a cualquier hora del día. Esto le distingue a los tradicionales globo-sondas, esas estaciones meteorológicas que se lanzan a la atmósfera dos veces al día desde los principales observatorios del mundo y que una vez usados ya resultan inservibles.  

Dos científicos de este centro de investigación acaban de regresar de Nueva Zelanda de realizar los últimos toques a la calibración de estos nuestros instrumentos meteorológicos con un éxito rotundo. Todo pinta a que el futuro es apasionante. En esta entrevista hemos hablado con los dos líderes de este proyecto, César Azorín y José Gómez. Pincha en la imagen y escúchala. Se emitió el pasado miércoles, 21 de junio de 2025 en “El Sol sale por el oeste”.  

Más Información
Imagen
my image

La confusión entre un globo-sonda y un globo-espía siembran la desconfianza entre Estados Unidos y China

Imagen
my image

El viento está perdiendo fuerza en todo el mundo

Imagen
my image

Se publica una investigación sobre los vientos regionales, fundamentales en el impulso económico y el respeto al medio ambiente