El hongo fue encontrado en un paraje muy próximo a Barcarrota.
Juan María González, vecino de Barcarrota y aficionado a la micología, no había encontrado antes nada igual. Un boletus gigante de 30 centímetros de sombrero y 1.120 gramos de peso.
Lo encontró cerca de Barcarrota, en un terreno en plena dehesa de unas tres hectáreas donde tiene una casa familiar. El hallazgo se produjo hace unos días, cuando paseaba junto a sus hijos Nacho y Noé, de 7 y 4 años.
En concreto, el boletus es de la variedad aereus, muy apreciado por su calidad en gastronomía. "Era un ejemplar de unas dimensiones tremendas, con mi propia mano era incapaz de abarcar el diámetro de su tallo", relata Juan María.
Pero su asombro y el de sus hijos no quedó ahí. Junto al boletus gigante, había otros tres de grandes dimensiones igualmente, de entre 300 y 650 gramos de peso.
Rincón sombrío y muy húmedo
Encontrar semejantes ejemplares en tan poco espacio no resulta muy usual, sobre todo en plena dehesa, comenta su recolector, que explica esta circunstancia por un cúmulo de condiciones.
La principal es que el hallazgo se produjo en un rincón sombrío, a los pies de un alcornoque y en una zona sin excesiva vegetación, algo que facilitaba la presencia de mucha humedad.
Además, la zona se encuentra libre de ganado, por lo que el boletus pudo crecer en esas mayúsculas dimensiones.