Navegar el Guadiana, a su paso por Badajoz, en barca era una imagen habitual a principios del siglo pasado. Imagen que se podría repetir en solo unas semanas, gracias al trabajo de la Asociación Cívica Ciudad de Badajoz.
Estas embarcaciones, de madera, eran muy habituales a principios del siglo pasado, en la capital pacense. Algunos las utilizaban por ocio, para cruzar el río Guadiana y disfrutar de la playa que había en las orillas. "Teníamos la suerte de contar con 3 playas y, además con diferentes embarcaderos, que bueno alquilaban lo que son las barcas, que son tan seña de identidad", cuenta Juan Carlos Arce, directivo de la Asociación Cívica Ciudad de Badajoz.
Unas barcas que también se utilizaban para ir a trabajar, como medio de transporte de otros enseres y para pescar. Estas embarcaciones estuvieron operativas hasta la década de los 80.
Ahora, este grupo de nostálgicos trabajan en la rehabilitación de la última barca de ocio que se fabricó en 1983 por el poblanchino, Pedro. "El objetivo es claro, devolvérselo a la ciudadanía de Badajoz, exhibirla, evidentemente la voy a probar, vamos a intentar reflotarla, entre comillas", asegura Juan Carlos Arce. Algo que va a ocurrir en tan sólo unas semanas. "Una vez que la probemos, que se pruebe en el río directamente, vamos a intentar dar algunos paseos, prepararla para que la gente pueda disfrutar de ella también", añade.
Marisol Sudón, miembro de la Asociación de Recreadores de Badajoz va más allá. "Nosotros, si conseguimos un traje más representativo de la época, podremos recrear esos momentos de la historia de Badajoz, con nuestra barca, en nuestro río".
Cuando no esté en el río, la barca estará en la sala de exposiciones de la Ermita de los Pajaritos, donde va a permanecer abierta al público.
