Turno para la Iglesia extremeña. Las tres diócesis de la región se han pronunciado sobre el uso de las mascarillas dentro de los lugares de culto. Después de que el Gobierno central acordase suprimir su obligatoriedad en interiores, las tres curias han hecho suya la decisión.
La primera en hacerlo ha sido la Archidiócesis de Mérida-Badajoz, que en un comunicado explica que "decae la obligatoriedad del uso de la mascarilla en todos los lugares de culto de la Archidiócesis, así como en los centros pastorales y asimilados".
La medida también la ha adoptado la Diócesis de Coria-Cáceres en unos términos similares. Ambos obispados han hecho no obstante un llamamiento a la prudencia y al cuidado de los fieles en situación de mayor riesgo ante la COVID-19.
Las diócesis llaman también a la prudencia y la responsabilidad
Por eso recomiendan que además se siga utilizando la mascarilla "en cualquier situación en la que se tenga contacto prolongado con personas a distancia menor de metro y medio", y que haya un uso responsable "en espacios cerrados de uso público en los que las personas transitan o permanecen un tiempo prolongado", apuntan.
En cuanto a los sacerdotes, se aconseja llevar la mascarilla tanto en la consagración como en el reparto de la comunión.
Plasencia lo asume
De momento, la única diócesis extremeña que no ha sido tan explícita es la de Plasencia. Según su vicario general, Jacinto Núñez, asumen que las mascarillas no son obligatorias dentro de los templos.
Para ello se remiten a lo ya aprobado por el decreto del Gobierno central. Con todo, explica Núñez, "si los responsables de los espacios eclesiásticos deciden otra cosa por las circunstancias puntuales que se den, nosotros no vamos a intervenir".