El Colegio San Antonio de Padua se fundó en 1921 con seis alumnos. Un siglo de historia y compromiso con la educación en Cáceres y en la región que le ha valido que se le otorgue la medalla de Extremadura el próximo 7 de septiembre.
Para su directora, Sonia Martín, es todo un orgullo recibir esta distinción. Según ha dicho, el centro conserva el carisma franciscano y las ganas y el esfuerzo del primer día.
Educación en valores
A los alumnos, además, se les procura ofrecer una educación en valores en la que no faltan las actividades solidarias y la transmisión de la cultura extremeña, con celebraciones como el propio día de la región o la festividad de San Jorge, patrón de Cáceres. La idea es mantener un centro abierto y con cabida para todos.