Danza, clases de teatro, de idiomas, de creatividad...Con el comienzo del curso, los pequeños retoman sus actividades extraescolares. Eso sí, llegan algo cambiadas, como casi todo. Preparadas más bien para evitar nuevos contagios por coronavirus.
Las precauciones generales son comunes a las de cualquier reunión, pero a partir de ahí toca a afrontar las particularidades de cada disciplina. Nos lo recuerda Carmen Rivero, directora de la Escuela de música Enclave, en Cáceres. Entre clase y clase limpian cada instrumento, y para el alumnado que recibe clases de canto han dispuesto medidas extraordinarias. De hecho están separados por 2 metros 10 centímetros, usan fundas de micrófonos individuales y desechables, atriles con mamparas de metacrilato y una pantalla gigante hace barrera para las actuaciones individuales.
Las precauciones generales son comunes a las de cualquier reunión, pero a partir de ahí toca a afrontar las particularidades de cada disciplina.
Es un reto abordar algunas adaptaciones a la "era covid", sobre todo en los deportes de contacto. El director de la escuela de judo "Jorge Palacios", que así se llama, nos explica que hay muchos modos de entrenamiento de este deporte educativo, el judo y una de ellas, de origen japonés, se basa en practicar judo en solitario, así es que se ha lanzado a por esa fórmula que añade, eso sí, el uso de mascarilla constante durante toda la práctica.
Al tratarse de educación no reglada, la Junta de Extremadura nos confirma que estas actividades se rigen por los protocolos para actividades deportivas, culturales o de ocio de la región y no por los que marca educación.
Hay una enorme variedad de actividades extraescolares posibles, pero la mayoría de las empresas que las ofrecen tienen un denominador común, y es que han sumado a sus propias normativas específicas las de educación y las recomendaciones de expertos. Nos los confirma Alejandro Durán, profesor en Liceo Hispánico, en Cáceres y también Carmen Barrero, coordinadora covid de Deans English School en Badajoz. Carmen nos señala que su actividad como academia queda adscrita a la normativa de consumo, pero que no han dudado en incorporar a esta medidas extraordinarias, más propias del protocolo de educación, para ofrecer mas garantías frente al virus COVID 19.
Profesionales del sector lamentan que ninguna autoridad sanitaria les haya dado orientaciones para desempeñar su labor de manera segura
Por su parte Helena Guerra, de Coconet Mentes Creativas, en Cáceres, señala que ninguna autoridad sanitaria se ha puesto en contacto con su proyecto para dar orientaciones básicas en su contacto diario con grupos de niños. Ha creado su propio protocolo de seguridad siguiendo las recomendaciones de la OMS, del Colegio de enfermería y los protocolos propios de educación.
El objetivo: garantizar que el virus se queda fuera.