Tras el rechazo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura a los toques de queda solicitados por la Junta, el gobierno regional se plantea ahora cierres perimetrales para los municipios con más de 15.000 habitantes.
Preocupa especialmente la situación de Plasencia, con una incidencia a los 14 días superior a los 1200 casos por cada cien mil habitantes. En el municipio, ni vecinos ni ayuntamiento acogen con agrado la propuesta de la Junta. Ambos coinciden en que "el cierre es excesivo" y que "supondrá un lastre para la economía de la ciudad". "Con la vacunación quizás nos hemos confiado demasiado, y el virus sigue ahí", dice un vecino de la localidad.
La capital del Jerte, junto con Don Benito, con 810 de incidencia, son las dos localidades que sobrepasan la barrera de los 500 casos necesaria para implantar el cierre perimetral.
En Don Benito hay 193 casos notificados. Muy cerca de ese nivel se encuentra, además, Navalmoral de la Mata, con 420 casos por cada cien mil habitantes.