El tren Alvia que une Madrid con Extremadura está sufriendo esta tarde un retraso de unos 50 minutos. Una incidencia que, en este caso, nada tiene que ver con Renfe. El motivo del retraso se debe a un incidente, a bordo del tren, después de que unos pasajeros increpasen a la interventora.
La trabajadora ha pedido la intervención de la Guardia Civil en la localidad toledana de Oropesa, pero el puesto estaba cerrado por lo que el tren prosiguió trayecto hasta Navalmoral de la Mata donde ya sí pudo actuar la Guardia Civil. Tras ser identificados, los alborotadores han decidido abandonar el tren por voluntad propia.
La hora prevista de llegada del tren a la última estación, la de Badajoz, era a las 20:55, pero tras este incidente, el horario ha aumentado hasta las 21:46. Los viajeros que van a otras estaciones y que debían de hacer trasbordos, han perdido algunas conexiones. Por ejemplo, a aquellos que viajan a Montijo les llevarán en taxi.