Miguel Ángel Perera con el capote en el primero de la tarde
La Feria taurina de Mérida no pudo estrenarse mejor. El público disfrutó en una tarde-noche redonda donde se repartieron siete orejas en el Cerro de San Albín. Ginés Marín cuajó la mejor actuación, destacando en el primero tanto con el capote como con la muleta y completando una segunda faena más esforzada con una estocada impecable. Las tres orejas no tuvieron contestación.
Un apéndice en cada ejemplar se llevó Miguel Ángel Perera. El de Puebla del Prior consiguió sus mejores tandas en el primero, con una faena que brindó a sus abuelos, presentes en la plaza; pero también en es segundo estuvo por encima de un toro demasiado manso robándole tandas que apenas tenía.
También oreja y oreja se llevó Daniel Luque en el segundo y el quinto de la tarde, demostrando de nuevo su gran estado de forma, su madurez, y su capacidad de sobreponerse a toros difíciles.