La lluvia, de nuevo, deslució un concierto del Stone & Music. En este caso, le tocó al argentino Andrés Calamaro. Su espectáculo no tuvo que suspenderse, pero el agua obligó a que acabase algo antes de lo previsto.
Una lluvia que, casi desde el principio, acompañó a su actuación. Primero de manera suave, pero, cuando pasaba la primera hora de concierto, se tuvo que hacer una interrupción de 10-15 minutos. Posteriormente, el argentino retomó, con algunas canciones más de su repertorio, pero el concierto tuvo que suspenderse, finalmente, cuando todavía faltaban por sonar éxitos como 'Flaca' o 'Paloma'. El artista, posteriormente, aseguró en redes sociales que se había hecho lo posible por seguir, pero que su staff recomendó que el concierto finalizase ahí.
Fue en el momento de la despedida, cuando llegó la polémica. "Vuelvo en cuatro años y medio. Vuelvo, volvemos el día que Rubiales y Jennifer puedan acercarse a menos de 200 metros", afirmó, haciendo referencia al polémico beso no consentido entre el expresidente de la Federación Española de Fútbol y la jugadora de la selección, campeona del mundo.
No fue la única frase polémica que dijo en ese momento. "Volveremos con Eva de Amaral mostrando las peras y a Rubi con mucho pelo, recién llegado de Turquía", dijo, en referencia al gesto de la cantante Eva Amaral al mostrar sus pechos de manera reivindicativa.
Justo un instante antes, Calamaro había cogido un capote y a ritmo de pasodoble hizo unos cuantos de movimientos taurinos, ante los aplausos de sus fans allí congregados.
El concierto acabó con un grupo de asistentes protestando por la suspensión del concierto.