Era una de las citas más esperadas de esta edición del Stone & Music. Joan Manuel Serrat arrasó anoche en el Teatro Romano de Mérida. Agotó todas las entradas de uno de sus últimos conciertos, antes de apartarse de los escenarios y puso en pie al público.
Serrat fue recibido con una gran ovación antes de arrancar, con 'Dale que dale', un concierto intimista, jalonado con los grandes temas de la banda sonora de varias generaciones. 'Mi niñez', 'El carrusel del furo', 'Romance de curro de palmo' y 'Señora' fueron las siguientes canciones de un espectáculo que se fue a las dos horas. Homenajes a sus familiares y recuerdo de las duras épocas de la Guerra Civil y la posguerra.
También se pudieron escuchar otros temas conocidos como 'Lucía', 'Algo personal' y 'No hago otra cosa que pensar en ti'. Sonaron hasta 23 de sus grandes éxitos. Canciones de ayer y hoy que corearon sus incondicionales, con quienes Serrat mantuvo un idilio y una comunión perfecta durante toda la velada. El cantautor barcelonés interactuó en todo momento con un público que le mostró su respeto y cariño.
La majestuosidad del Teatro Romano, al compás de sus canciones, recreó, en aquellos afortunados que pudieron asistir a la cita, imágenes imborrables.
Con 'Penelopé', Serrat puso el broche al primero de sus dos conciertos en Mérida. Para el segundo, esta misma noche, sus aficionados miran al cielo y esperan que la lluvia no desluzca la velada.