20 Febrero 2022, 19:55
Actualizado 20 Febrero 2022, 19:50

¿Cuántos días puede estar sin llover en España? Es la pregunta que se realizaron los doctores en Geografía Física Roberto Serrano Notivoli (de la Universidad de Zaragoza) y Dominic Royé (de la Universidad de Santiago de Compostela) y cuya respuesta ha visto la luz en un curioso estudio cuyo enlace te dejo abajo.  

Estos dos investigadores definieron el concepto de racha seca como el número de días consecutivos sin llover. No es lo más acertado en situaciones excepcionales de sequía ya que, si llueve, por poco que sea, te rompe la racha seca.  

Las rachas secas son el número de días consecutivos sin llover 

En el trabajo se ve que en el conjunto nacional la duración de las rachas secas varía en función de la zona de estudio. Mientras que en el Cantábrico es de apenas 4 días, en la meseta norte puede llegar a la semana. Sin embargo, al sur del Sistema Central los periodos se amplifican. En el centro es fácil estar semana y media sin caer una sola gota de lluvia y más de dos semanas en el sureste. Estas conclusiones están acordes con el predominio de los vientos de componente oeste en la península.  

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Duración de las rachas secas en el cómputo anual, según el estudio de Serrano y Royé. 

En Canarias, por encontrarse inmersas por la hegemonía de los vientos alisios del noreste, las rachas más breves se dan en la cara norte del archipiélago (donde las lluvias habituales originan la laurisilva) mientras que existen zonas del sur donde puede estar más de mes y medio sin llover.  

Centrándonos en Extremadura, también encontramos diferencias significativas. Según este trabajo, en las sierras del norte de Cáceres las rachas secas duran poco más de una semana; mientras que en las comarcas más orientales de la provincia pacense se disparan a casi dos. El resto de la comunidad se sitúa entre esos dos límites.  

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Evidentemente, la duración de las rachas secas varía en función de la época del año, siendo durante el verano cuando son más acusadas y el invierno cuando son más breves debido a una circulación de las borrascas más meridional afectando de lleno a nuestro país y, por tanto, a Extremadura. 

En el trimestre diciembre-febrero los máximos nacionales vuelven a darse en el Cantábrico con rachas de menos de 4 días de duración, en contraste de los más de 14 del sureste. En Extremadura suele rondar entre los 6 y 8 días, aunque en el entorno de las sierras de Gata y de Gredos es mucho menor, similar al del Cantábrico con menos de 5 días.  

Las estaciones intermedias son muy parecidas, si bien parece que el otoño es un poco más seco que la primavera. La cornisa cantábrica sigue con su tónica de rachas secas menores a los 5 días y en el Mediterráneo se superan los 14. En Extremadura nos movemos a unos 6-7 en primavera y a unos 8-9 en otoño. No se trata, por tanto, una diferencia significativa.  

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Duración de las rachas secas según la estación del año, según el estudio de Serrano y Royé. 

Decíamos que es en el verano cuando apenas llueve en casi todo el país. La excepción la marca, de nuevo, el Cantábrico donde los vientos marítimos del norte dominantes en esos meses aportan humedad y generan lluvia al encontrarse con las montañas cercanas del mar. Se observan, además, un par de máximos: uno en el Alto Ebro y otro en la Ibérica turolense. Ambos son consecuencia de las habituales tormentas que allí se forman en la época estival. Más hacia el sur hay un claro y drástico aumento de la duración de los días de racha. En áreas de Andalucía puede estar sin llover más de dos meses seguidos.  

Centrándonos en Extremadura, de nuevo es el Sistema Central donde las tormentas estivales originan el mínimo de duración de las rachas secas, situándolas entre 2 semanas y 2 semanas y media; mientras que el resto de la comunidad autónoma los valores se sitúan por encima de los 20 días.  

Pero, ¿llueve ahora con menos frecuencia que antes? ¿los periodos secos actuales son más intensos que los de antaño? Estamos hartos de oír a nuestros mayores: “antes llovía más”. Usando técnicas estadísticas es posible dar “marcha atrás en el tiempo” y poder así establecer tendencias. Y los resultados son sorprendentes: en el conjunto nacional los números de días de las rachas secas han disminuido, es decir, que llueve con más frecuencia, lo que no quiere decir que llueva más, ojo. Eso sí, se trata de una ligera tendencia y no de un cambio drástico.  

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Tendencia de la duración de las rachas secas en las últimas décadas, según el estudio de Serrano y Royé. 

Donde más se ha notado este comportamiento ha sido en el cuadrante sureste peninsular, con un acortamiento superior a 1 día por década. Esto también lo vemos en Extremadura, en contra de la apreciación generalizada, pero es más discreto, de 0,5 a 1 día menos de racha seca cada 10 años. En esta misma sintonía están otras regiones mediterráneas. 

En contra de lo pueda parecer, el número de días consecutivos sin llover en Extremadura ha disminuido 

¿Puede estar detrás de estos cambios el cambio climático antrópico que estamos sufriendo? Pues es difícil establecer esta relación ya que la precipitación es una variable muy irregular en el tiempo, al contrario de la temperatura. Sin embargo, sí que podría haber un vínculo en los cambios de patrones de la Circulación General de la Atmósfera que también se están observando.  

Entonces, si la tendencia de llover con más frecuencia se mantiene: las sequías serán cada vez más breves, ¿no? Pues no. Que se acorte el número de días seguidos sin llover no implica necesariamente que las sequías desaparezcan de nuestro país. Para empezar, las dimensiones temporales son distintas: para las rachas secas empleamos unidades de días; para las sequías, de meses. Por otro, en las sequías intervienen otros factores como son la humedad del suelo y el clima de la zona; es decir, no es lo mismo que esté un mes sin llover en Oviedo que en Almería. Lo que para la ciudad asturiana es extraordinario, la para la andaluza es lo más habitual.  

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Tendencia de las rachas secas en las últimas décadas, según el estudio de Serrano y Royé. 

De lo que no hay duda es de que la existencia de patrones de bloqueo anticiclónico en el Atlántico norte nos afectan de lleno a la península, evitando cualquier intento de las borrascas para acercarse a nosotros. Diversas líneas de investigación siguen esta línea: ver si estas situaciones tan estáticas serán más frecuentes en las próximas décadas. 

Puedes ver el artículo completo de Roberto Serrano y de Dominic Royé en https://www.geografiainfinita.com/2018/08/cuanto-puede-estar-sin-llover-en-espana-las-rachas-secas/

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