El brote de Quintana de la Serena preocupa especialmente, no sólo por los doce contagios confirmados, sino por la alta incidencia de silicosis en la zona.
Son 400 los vecinos que padecen la enfermedad pulmonar derivada de la extracción de granito en las canteras. Una afección que agravaría considerablemente un contagio por COVID-19.
Por eso la Junta ha decidido realizar la prueba PCR a todos los que padecen silicosis, no sólo a los positivos. Una decisión que agradece la corporación municipal, por el mensaje tranquilizador que supone para su población en estos momentos.
Preguntado por los periodistas, el consejero de Sanidad, no ha descartado hoy retroceder en Quintana de la Serena a la fase 2 si la cifra de contagios se agrava. Un extremo que el alcalde de la localidad, Raimundo Dávila, considera comprensible.
39 positivos y nuevos brotes en Almendralejo, Torrecilla de la Tiesa y Quintana de la Serena