Después de Ruslana, llega Illia. Ruslana nació en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres el pasado 13 de junio. Ilia vino al mundo este martes en el Hospital de Llerena. Las dos en perfecto estado de salud y rondando los tres kilos de peso. Nada fuera de lo normal hasta que nos fijamos en sus familias: refugiados ucranianos en Extremadura. Sus padres tuvieron que huir del horror de la invasión rusa y hoy pasean a sus bebés por Malpartida de Cáceres y Cabeza la Vaca.
Alexi y Natalia están felices después de tanto sufrimiento. Llegaron a Cabeza la Vaca en abril, pocos días después del estallido de la guerra y con el embarazo ya en estado avanzado. Al sur de la provincia de Badajoz han encontrado un hogar inesperado que, desde este miércoles, ha crecido con la preciosa Ilia.
Aunque sus padres aún no saben mucho español, Álex nos explica en inglés lo agradecido que está: "Hemos podido encontrar a mucha gente buena y hemos tenido mucha ayuda". Entre esa gente buena, Gonzalo, el vecino que conoció su situación, los rescató de su país y convirtió su casa inhabitada en Cabeza la Vaca en un hogar cálido y agradable para esta familia de refugiados.
Allí vive Álex con su mujer, Natalia, y su otra hija de 9 años, Ivana que se ha integrado perfectamente en su nuevo entorno. "Está muy contenta en el colegio y tiene muchos amigos", explica satisfecha Natalia mientras mece a la pequeña Ilina.
Juntos esperan algún día puedan regresar a Ucrania. Ese horizonte parece ahora muy lejano. Pero cuando llegue, siempre tendrán en su memoria la experiencia vivida. Y siempre podrán recordar a la pequeña Ilina que vino al mundo un 2 de agosto. Y que fue al sur de Europa, al sur de España y al sur de Extremadura, en un hermoso pueblo llamado Cabeza la Vaca.
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