Juicio contra el ex-alcalde de Coria por prevaricación y malversación de caudales públicos. Juan Valle se ha sentado en el banquillo por presuntamente adjudicar dos obras en 2008 de manera irregular al arquitecto municipal, que también está acusado en este proceso.
La fiscalía y la acusación particular, que ejerce el Ayuntamiento de Coria, solicitan cinco años de cárcel, 18 años de inhabilitación para cargo público y una indemnización de unos 60.000 euros, que sería la cantidad defraudada. La defensa, en cambio, pide la libre absolución.
Declaración acusados
El ex-alcalde cauriense, desde 2007 a 2011, ha negado que cometiera alguna irregularidad 'a sabiendas'. Y ha asegurado que siempre confió en los informes municipales de los asesores jurídicos.
También ha querido dejar claro que él siempre se negó a abonar facturas al arquitecto por los trabajos realizados, al considerar que entraban dentro de sus responsabilidades como funcionario del Ayuntamiento.
"Nadie me avisa de que estaba cometiendo una irregularidad"
Por su parte, el arquitecto también ha manifestado que "nunca fue consciente de estar llevando a cabo ninguna ilegalidad, porque los contratos siempre contaron con el visto bueno de los asesores del Consistorio". En este sentido, ha aclarado que "no fraccionó las facturas para poder cobrarlas y que jamás ha recibido dinero de las arcas públicas".
"Jamás ha recibido dinero de las arcas públicas"
Los dos acusados han coincidido además en apuntar que este juicio tiene un trasfondo político. Se trataría, han explicado ambos, de un presunta "venganza política' del actual alcalde de Coria, José Manuel García Ballestero. Al parecer, el motivo tendría que ver con una querella anterior que el arquitecto interpuso contra el regidor y que se negó a retirar.
Los hechos
Los hechos se remontan a mayo de 2008, cuando, según la acusación pública, Juan Valle resolvió de manera arbitraria encomendar al arquitecto del Ayuntamiento la redacción del proyecto básico y ejecución de un edificio como centro de día. La Fiscalía asegura que el alcalde lo hizo "a sabiendas de su ilegalidad, al no seguir el procedimiento legalmente establecido para la contratación pública y no garantizando la libre concurrencia".
El 20 de enero de 2009 el arquitecto presentó en el registro del Ayuntamiento de Coria una factura por la obra que ascendía a 58.000 euros.
Lo mismo pasó con una guardería en Puebla de Argeme (núcleo urbano dependiente de Coria). El alcalde decidió en junio de 2008 encargar el proyecto y ejecución al mismo arquitecto que en el año 2009 presentó en el registro del Ayuntamiento una factura de 25.748 euros.
Las dos facturas llegaron a manos de la interventora general de fondos del Consistorio, que emitió sendas notas de reparo a pagarlas. La razón, que las dos superaban el importe de 18.000 euros establecido como límite para los contratos menores. Entonces otros técnicos presentaron facturas inferiores a esa cantidad, pero todas relacionadas con las mismas obras.
Estos técnicos han acudido al juicio como testigos, al igual que la interventora. En total, casi una decena.
Un juicio que previsiblemente quedará este martes visto para sentencia.