Pocos deportistas pueden presumir de disputar unos Juegos Olímpicos y menos aún de lograr un diploma. Es el caso de Estefanía Fernández que en estos juegos estuvo cerca de lograr una medalla en el K4-500m y que al final quedó en sexta posición. La emeritense también participó en otra prueba individual a la que llegó a semifinales. "Un sueño hecho realidad" para la piragüista que debutaba en unos JJOO.

Para ella, estas semanas han sido "inolvidables, la mejor experiencia deportiva de mi vida". Algo que Estefanía veía por la televisión desde que era chica y que a día de hoy se ha convertido en una realidad el poder participar con los mejores deportistas del mundo y poder compartir con ellos la experiencia de la Villa Olímpica. Asegura que "siempre preguntaba a otros extremeños cómo era la experiencia y me decían que era algo inexplicable y que había que vivirlo". 

Habían opciones de conseguir alguna medalla en la competición por equipos, pero finalmente se quedó en un sexto puesto. Eso sí, Estefanía tiene claro que "no podría cambiar nada, dimos el 100% por nuestra parte". Es por eso que está "muy tranquila de haber dado nuestra mejor versión y con más ganas aún de participar en el siguiente ciclo olímpico en Los Ángeles". Con respecto a su amigo Álvaro Martín Uriol, está muy contenta por sus dos medallas y dice que se siente "muy orgullosa por él de que haya conseguido lograr su sueño".

Esta pretemporada ha dejado dos grandes noticias al Villanovense de Gus. El técnico va a poder contar en su plantilla con Óscar Muñoz y Joshua Farrel después de las graves lesiones que han sufrido ambos jugadores en las últimas temporadas. Ya se pudo ver el pasado sábado a ambos futbolistas sobre el terreno de juego en el amistoso contra el Mérida.

Después de casi dos años sin jugar un partido oficial, Óscar regresa a las órdenes de Gus habiendo pasado por dos lesiones graves en sus rodillas. El pasado sábado tuvo minutos en el amistoso contra el Mérida en el Municipal Villanovense, un momento que para él fue muy importante porque "hacia mucho tiempo que no jugaba en el Municipal y al ver a la gente apoyarme y aplaudirme cuando entré fue todo un orgullo". El centrocampista dice que "al principio tuve molestias en el rotuliano, pero a partir de ahí ha ido la cosa muy bien". Ya se está adaptando al ritmo de entrenamientos del resto de sus compañeros y está "muy contento con la continuidad". 

Situación parecida ha vivido Joshua Farrel que se perdió toda la liga pasada por una lesión grave en los primeros partidos de la misma. El delantero galés dice que se ve "muy bien y sin lesiones que eso ahora lo valoro mucho más". Ha regresado al verde y vuelve a tocar balón junto a sus compañeros, tanto en los entrenamientos como en partidos amistosos como el del otro día en el Municipal Villanovense. Pudo jugar delante de su afición y reconoce que "fue una alegría porque era mi objetico desde que me lesioné, el volver a jugar en casa delante de los aficionados".