23 Enero 2021, 15:44
Actualizado 23 Enero 2021, 15:44

El 70% de la población extremeña vive en algunas de las localidades que han cerrado su hostelería, su comercio y demás servicios. Son aquellas localidades de más de 3.000 habitantes, pero esta medida también la sufren núcleos mucho más pequeños, que dependen de esos municipios restringidos.

Es el caso de las pedanías, como Huerta de Ánimas, dependiente de Trujillo, que se ven obligadas a cumplir los cierres de los pueblos más grandes. 

Algunos vecinos comparten la decisión, otros no porque no entienden, dicen, que los negocios tengan que cerrar sin haber contagios en su pedanía.