La Guardia Civil ha iniciado una investigación para identificar a los responsables de dos actos de sabotaje en los depósitos de agua de Barrado, en el Valle del Jerte, que han obligado a cortar el suministro en la localidad. En menos de 48 horas, los depósitos han sido contaminados dos veces con una sustancia aún no identificada, lo que ha generado preocupación entre los vecinos y autoridades.
Primer sabotaje
El primer incidente ocurrió el pasado viernes, cuando una sustancia desconocida fue vertida en los depósitos, obligando a vaciar 1,5 millones de litros de agua. Como medida de precaución, el servicio se suspendió durante 24 horas. Sin embargo, en la madrugada del lunes, el mismo depósito fue nuevamente saboteado, repitiendo la contaminación y forzando otro corte en el suministro.
La alcaldesa de Barrado, Sonia Llorente, expresó su frustración ante la situación, indicando que mientras el primer incidente podría haberse interpretado como una broma de mal gusto, la repetición del acto sugiere una intención deliberada de causar daño.
Los sabotajes han afectado gravemente a la vida diaria de los vecinos, quienes se ven obligados a depender de agua embotellada o de una fuente local. Además, el depósito afectado abastece a cinco municipios de la comarca, siendo Barrado el más perjudicado al no contar con captaciones propias.
Investigación
El delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, ha confirmado que el Seprona y Salud Pública están trabajando conjuntamente para analizar la sustancia vertida y garantizar la seguridad del agua. Mientras tanto, la Guardia Civil está revisando las imágenes de las cámaras de seguridad recientemente instaladas en la zona, con la esperanza de identificar a los culpables y evitar futuros incidentes.
Si el servicio no se restablece en las próximas 24 horas, se recurrirá al suministro mediante camiones cisterna, como se hizo el pasado fin de semana. Los vecinos de Barrado, visiblemente molestos, esperan una pronta resolución para recuperar la normalidad en su vida cotidiana.